Hola
Hacía tiempo que no entraba aquí... Inconscientemente, me alejé de esta página.. Quizás porque había cosas más importantes para mí. También ha sido un curso duro para mi en cuanto a estudios y vida personal... Pero al final, tengo mi aprobado y parece que mi vida personal se va solucionando (lugar de residencia, etc).
He leído a algunas chicas que han vuelto a comer y a otras que ya no vomitan, pero sin embargo siguen con los mismos pensamientos de "estoy gorda" o siguen haciendo ejercicio...
Os pido que no perdáis la esperanza y que no hagáis caso a quienes dicen que esta enfermedad no se cura nunca, porque es una afirmación ridícula. No creo que haya ninguna fórmula para superarla... Ni un tiempo en que se pueda decir "lo he superado". El caso es luchar cada segundo de vida e intentar buscar la raíz del problema, que es muy muy complicado, pero esta allí y hay que llegar a ella.
En cuanto a mi anorexia, va a hacer un año ya desde que la quise apartar de lo que quedaba de mi vida.
Esto puede que interse a varias:
Como absolutamente de todo, incluso ahora apenas como fruta y verdura (quizás es que la aborrecí jajaja!) que ya sé que debería comer más fruta, pero no me como el tarro. Como dulces (me ha salido una maldita caries), salados, amargos, ácidos, proteínas, hidratos,... De todo jeje. No hago deporte, pero ya dije que tenía pensado después del verano apuntarme a baile y a natación (a natación seguro) y básicamente porque el deporte es muy importante para liberar tensión y crear endorfinas (las encargadas de sentirse feliz). No tengo en mente hacer deporte para estar más delgada porque no me interesa ya... Ahora mi cuerpo ha cambiado, estoy muchísimo mejor. Es cierto, tengo más celulitis, tengo más chichas, el culo lo tengo más fofo... Pero no es algo que me preocupe porque me quiero, tal y como soy y sé que todo tiene solución y que si quiero tener el cuerpo más tonificado la solución es hacer deporte. No es mi obsesión. Sé que hay soluciones y que cuando quiera yo me pongo. Ahora mismo no hay nada más genial que compartir un trozo de pizza grasienta con alguien a quien quieres y no sentir esa culpa maldita de antaño.
Es cierto que no soy la mujer más bella del planeta y que por la calle hay mujeres preciosas.. Pero yo soy yo y tengo cosas que ellas no tienen, cosas fabulosas que sólo yo sé y me basta. Y no hace falta ser preciosa para ser bella.
El otro día me acordé de una frase que me dijo mi novio "te empeñas en pensar que los defectos que tú te ves, te los vemos los demás"... Y tiene toda la j0dida razón. Nos empeñamos en que los demás verán esa estría blanca que atraviesa nuestro culo de arriba abajo, cuando lo mismo ni se fijan y si se fijan, les da exactamente igual. Sin esa estría, no serías tú. La pregunta es ¿quieres ser tú?
Creo que puedo haber llegado a la raíz del problema. Esto que voy a explicar puede ser un poco complicado, pero lo intentaré resumir y explicar de la mejor manera posible. Resulta que hay una terapia que se conoce como terapia sistémica (de la que podéis informaros por wikipedia) de la que yo nunca había oído y hace un mes conocí a una mujer que me habló de la anorexia desde ese punto de vista sistémico. Según ésta, la anorexia es un amor profundo e inconsciente hacia los padres en el que el enfermo decide morir por el padre o la madre. En el caso de la hija, es hacia el padre y en el caso del hijo, hacia la madre. Puse mucha atención a esto que me dijo la mujer porque desde que tengo uso de razón he amado con locura a mi padre, tanto que me duele el alma.
Me habló de una especie de árbol genealógico, en el que cada persona debe ocupar su lugar correcto (en él también cuentan los abortos y los seres fallecidos antes de tiempo). Si una persona ocupa su lugar erróneo, hay desorden. Las mujeres, unidas, forman una gran cadena poderosa y los hombres igual. En el caso de la anoréxica, ésta decide situarse en la cadena de los hombres, desordenando su vida. La manera de arreglar la situación es situándose en la parte de las féminas. (No llegué a preguntar cómo se hacía eso, pero tengo intención de hacerlo).
Otra cosa que me dijo es que la anoréxica tiene que aprender a vivir su vida, a saber "darse la vuelta". En mi caso yo siempre he estado pendiente de la vida de mi padre, de cómo ayudarle para quitarle pesos de encima, siempre he sufrido por él, por su vida personal, por sus desgracias... Habré sufrido más yo que él por su propia vida. Desde pequeña, mi tremenda preocupación era él. Mi gran amor y mi gran dolor es él, y eso es un error. Lo que haría más feliz a cualquier padre es ver cómo su hijo aprende a construirse un futuro para él, y a mí poco me importaba mi futuro. Me importaba el suyo, sólo el suyo. Prefería morir yo por él sin dudarlo un instante... Cargar todos sus dolores en mí y darle la felicidad.
Los papeles de "padre-hija" son completamente erróneos.
No sé si he explicado esto muy bien, es algo bastante complicado creédme. Pero el caso es que creo haber llegado al meollo de la situación: debo empezar a vivir mi vida, darme la vuelta y darme cuenta de que yo no puedo quererme menos a mi que a mi padre, que no puedo ser la que rescate a mi padre de sus problemas, que yo soy la hija y que es él quien en todo caso, ha de ayudarme.
No me entendáis mal, no se trata de pasar de él, sino de aprender que se crece y que yo no soy la madre, sino la hija.
Tendré que ver cómo hacerlo, porque es muy difícil.
En mi caso esta explicación ha sido la mejor que me han dado porque siempre he sentido una dependencia enorme de mi padre y eso mata. Es más, me comentó que si no solucionaba esa situación, nunca encontraría a una pareja estable a quien amar porque el gran amor de mi vida sería mi padre y nadie podría ser él, y siempre compararía a mis relaciones con él y acabaría llegando a la conclusión de que nunca les querré de la manera en que yo quiero a mi padre, y de que no son para mí. Yo no quiero eso.. Y en cierto modo me ocurre. Ahora tengo pareja, pero la estoy comparando con mi padre y es una locura... Busco a alguien parecido a él y jamás lo habrá. Tengo que aprender a amar a las personas por cómo son ellas, con sus defectos y sus virtudes. Y creo que con mi novio lo estoy haciendo, cada día que paso con él, busco algo que no se parezca a mi padre y lo aprecio.
Siento toda esta parrafada, de verdad, dudo que alguien haya llegado a leérselo, pero hacía tiempo que no entraba a escribir.
Un abrazo muy fuerte y a seguir adelante.
