Buenas noches a todas y a todos. Soy nueva en este foro pero las circunstancias me han llevado a encontrarlo y me alegro de ello. Antes de nada, el mayor de mis respetos y mis admiraciones hacia cada una de las personas y cada uno de los familiares que están luchando contra esta terrible enfermedad que es el cáncer.
Permitidme que os cuente mi historia. Tengo 31 años y me acaban de diagnosticar un cáncer de mama. Lamentablemente he tenido que vérmelas ya con esta enfermedad a lo largo de mi vida, aunque no en primera persona, ya que varios familiares directos han fallecido con motivo de esta enfermedad tan penosa, entre ellos mi madre. Con esto no quiero desanimar a nadie, ya que afortunadamente hoy en día existen muchos avances para poder salir exitosos de esta lucha. Yo misma tengo todas las esperanzas.
La vida me ha enseñado desde muy joven a ser fuerte, habiendo perdido a mi madre y siendo hija única además de otras desgracias a las que tuve que enfrentarme; y, nuevamente, tengo ante mí otro gran reto.
Mi ginecólogo dice que el diagnóstico ha sido precoz y por tanto el pronóstico es, según él, favorable. La semana próxima tengo que someterme a la operación para extirpar el bultito y, pese a estar localizado y no ser, según mi ginecólogo, estrictamente necesario, he decidido que me quiten el pecho. Sí, puede parecer una medida drástica y sé que cuando me vea a mí misma sin una parte de mí se me va a caer el mundo pero sé que en el fondo prefiero la tranquilidad de saber que, dados mis antecedentes, estoy minimizando riesgos.
Estoy asustada, muy asustada. Tengo mucho miedo, no os lo voy a negar. Miedo a sufrir, como todos. Pero también soy afortunada. Tengo a mi marido (mi chico, como yo le llamo). Llevamos 2 años casados y es lo que más quiero en este mundo. Estábamos siendo tan felices y ahora tiene que venir esto. No quiero hundirme, pero tengo miedo de terminar haciéndolo.
Mi chico me adora, igual que yo a él. Está siendo mi gran apoyo en estos momentos. Desde que supimos la noticia me mima aún más que antes. Todo el tiempo me está diciendo que todo va a salir bien; que es solo un contratiempo que hay que atender y ya está y que vamos a seguir siendo tan felices como hasta ahora. Él sabe mi vida, sabe todo por lo que he pasado, y también que motivado por ello tengo un pánico atroz a los hospitales y a todo lo que tenga que ver con ellos. No puedo ver una aguja delante...y ahora voy a tener que ver unas cuantas. Pero él estará conmigo, eso lo sé, y no para de decírmelo, que esto también lo vamos a vivir juntos y que nunca voy a tener que ir sola al hospital. Ya ahora para las pruebas del diagnóstico estuvo siempre apoyándome y la verdad es que así todo se vive de otra manera.
Pero tengo miedo. Miedo de que me pueda el miedo; miedo de no ser capaz de enfrentarme a toda esa carga de hospitales, aunque mi chico vaya a estar a mi lado dándome la fuerza que a mí me falte. Miedo de perder todo lo que he conseguido hasta ahora después de tantas desgracias.
Perder un pecho no me da miedo y mi marido también me apoya en eso totalmente, dice que es la garantía de que la curación va a ser total. Pienso operarme más adelante para ponerme una prótesis. Pero sí que me da miedo el momento de verme y también el momento en que él me vea, aunque sepa que lo nuestro está muy por encima de todo eso.
En fin, perdonadme el discurso y más a estas horas. Me voy a la cama. Buenas noches.