Hola a tod@s. Es la primera vez que escribo. La verdad, hasta hace bien poco no me planteaba siquiera hacerlo, pero ayer, casualmente (o providencialmente, según se mire) entré en este foro, y descubrí testimonios de gente con los que me sentí identificada. Mi propósito no es otro que escribir el mío y en cierto modo desahogarme también. Muchas gracias de antemano por permitírmelo.
Soy una chica de 24 años (por poco tiempo, ya que en unos días cumpliré 25). Aparentemente podría parecer que tengo todo para ser feliz. Bueno, mejor dicho, tenía. Desde hace unos años mi vida cayó en picado. A mi madre le diagnosticaron un cáncer de pecho que en principio pareció superar. Eso fue sólo temporalmente, ya que años después surgió la metástasis (horrible palabra) y finalmente mi madre falleció hace ahora un año. Me dejó totalmente vacía. Soy hija única y aunque discutíamos a diario (cosa que, por otro lado, me parece normal entre madre e hija) estábamos sumamente unidas.
Debo añadir que pocos meses antes del trágico desenlace (luego demúltiples ingresos y sufrimiento), a mi abuela materna le diagnosticaron un cáncer galopante que se la llevó en 5 meses. Hace ahora 2 meses, nuevamente un trágico suceso fue lo que supuso la muerte de mi abuelo materno. Es decir, en un año he perdido a 3 personas.
Suele decirse que el tiempo lo cura todo, o al menos ayuda. Sin embargo, en mí se está produciendo justamente lo contrario. Nunca dejé de asumir lo sucedido, sé que se han ido y que no van a volver nunca. Lo sé y lo asumo como tal. Sin embargo, conforme pasa el tiempo no puedo evitar sentirme más y más triste y sola. Es raro el día (o, mejor dicho, la noche) que no me paso mínimo 3 ó 4 horas llorando desconsoladamente, y eso, lejos de aliviarme, me deja destrozada.
Se preguntarán por qué cuento todo esto en este foro de problemas alimenticios. Hace ya varios años sufro un trastorno que me lleva a no querer comer. Es decir, me siento muy mal psicológicamente con la acción de comer. Es algo que rechazo totalmente. Nunca me he provocado el vómito, pero cada vez mis ayunos son mayores. Sé que mi peso está por debajo de lo recomendado (mido 1,71m y peso 46 kilos) pero aún así, sabiendo que estoy delgada, no me veo alarmantemente esquelética...
Mi madre era conocedora de esta situación, y siempre me dijo que tenía que comer...Sé que tenía razón, sin embargo, si no lo hice con ella en vida, ahora aún le encuentro menos sentido, ya que de alguna manera me da menos miedo hacerme daño a mí misma...
No sé, simplemente quería desahogarme. Si puedo ayudar a alguien o simplemente alguien quiere hablar, estoy aquí.
Muchas gracias y un fuerte abrazo.
Ánimo a tod@s.
Mostrar más