¡Hola chicas! Ya he vuelto, y la verdad es que teníais razón cuando decíais lo molesto que era llevar los tapones y respirar por la boca. No pegué ojo en toda la noche. Pero bueno, dentro de lo malo intento pensar en lo bonita que va a quedar. Me dijo el cirujano que me la había puesto recta y me había subido un poquito la punta, que me quedó una nariz pequeña y bonita. ¡Estoy deseando verla! Bueno, os voy a contar un poco cómo fue todo:
Ingresé a las 8 de la mañana, me llevaron a mi habitación a eso de las 8 y cuarto, y la enfermera me dijo que me quitara toda la ropa y todos los objetos de metal (incluído el piercing de plástico, pero por suerte me lo pude volver a poner después, aunque estaba casi casi cerrado), que cuando llegara el médico me haría unas fotos y ya iríamos al quirófano. Pues nada, fui al baño me desvestí, me puse el "hermoso" camisón ventilapedos (como le llamo yo), y todavía no me había descalzado cuando llaman a la puerta y está un enfermero con la camilla lista para llevarme a operar. ¡Casi me da algo! Me despedí de mi padre tan rápido como pude y ya en la sala de reanimación me hicieron unas preguntas (soy alérgica a la penicilina). Luego me llevaron al quirófano y pedí hablar con mi cirujano antes de que me durmieran y todos los que estaban allí preperándolo todo, que no eran pocos, me dijeron que sí, que no me preocupara que hablaría con él. Un minuto después me pincharon y me dijeron que me iban a poner un calmante. Empecé a ver borroso... y acto seguido ya estaba en reanimación con toda la cara bendada e hinchada sin haber podido hablar con mi ciru. Me pareció fatal, porque yo le quería decir algo que no le había dicho la última vez que hablamos: que porfavor, no me levantara mucho la punta y que me la dejara lo más posible parecida a la mía. No sé, era algo tan importante lo que le quería decir que me puse nerviosísima porque ahora ya no había marcha atrás. Pero bueno, una vez en la habitación ya me relajé, me dieron de comer y después de merendar vino a verme el médico y me dijo eso: que me había dejado una nariz pequeña y bonita. Yo confío en él, en que si me lo dijo tan seguro será por algo. Y nada más... vinieron a visitarme mi novio, una amiga y los padres de mi novio. Joooooo, mi novio estaba todo preocupado para no hacerme daño que me dió un beso en la mejilla y otro en la frente, pero justo cuando se iban a ir se me quedó mirando como triste y girando mucho mucho la cabeza nos dimos uno como dios manda, jaja. Es mi gran apoyo, nunca me dijo que me operara, pero sabe que tenía mucho complejo y en todo momento apoyó que lo quisiera hacer. Pues nada más, me dieron de cenar (me cuesta más tomar líquidos que sólidos, aunque parezca mentira, pero los sólidos los controlo más en la boca y me dejan respirar más) y me dieron una pastillita para dormir que no me hizo mucho efecto, porque tenía miedo a quedarme dormida y ahogarme por no poder respirar. La verdad es que cada vez que me dormía, a los diez minutos instintivamente me despertaba de golpe intentando tragar saliva porque se me había secado toda la boca. Pero bueno, esta mañana después del desayuno vino el médico y ya me dio el alta, así que dormí una horita en media más tranquila y haciendo lo mismo que me hacían en el hospital: ponerme gasas húmedas (de agua con hielo) en los ojos, para que baje la hinchazón. Tengo el ojo izquierdo hinchadísimo, al parecer tocaron más ese lado de la nariz y por eso tengo tanta sangre alrededor del ojo. Pero esto va bajando con el paso de los días. El viernes ya me quitan los tapones a las nueve y media de la mañana ¡por fín! jaja. Espero que el martes que viene me quiten ya la escayola para poder verme mi naricita y salir ya a la calle. Bueno chicas, he de poner más fotos en el álbum, si queréis verlo es: rino agnes, y no tiene contraseña.
¡Ánimo a todas las que estéis pensando en operaros, y si teneis cualquier duda que a estas alturas de mi operación os pueda resolver preguntadme lo que queráis! ¡Gracias por vuestros ánimos, que los he leído nada más llegar a casa! ¡Saludos!