Creo que mi amigo tiene vigorexia ¿alguien me puede informar?

Tengo un amigo,que tiene 25 años y apenas come nada, la comida "normal" toda le da asco o le pone pegas. La leche no la prueba porque dice que de pequeño escuchó que tiene microbios y le da asco, pero leche de ningun tipo ni animal ni vegetal, los vegetales y hortalizas tampoco los prueba porque dice que no le gustan, el pescado lo mismo.
Lo único que come son spaghettis o macarrones, el muesli para desayunar pero a palo seco sólo con un poco de agua. Lo que sí le gusta son los dulces pero como engordan no los prueba.Toma todos los días unas pastillas de suplemento vitaminico para aportar a su cuerpo las vitaminas que necesita y que al no comer no tiene.
Es un chico muy muy deportista, hace footing y sale con la bici todos los días, y todas las semanas va a la piscina 3 o 4 veces.
Él no está escualido, tiene un cuerpo musculado y está muy bien, pero yo creo que tiene un problema y así se lo he dicho, me dice que siempre ha sido así, pero creo que eso no es muy normal.
Espero que me podaís ayudar y decirme por los datos que os he dado si puede ser vigorexia o que puede ser.
Un saludo.

Hola
Hola!!
Yo la verdad no sé mucho del tema, pero la vigorexia, pro lo que tengo entenedido es obsesion pro estar en forma, cuadrado, musculado.... como lo quieras decir.
Por lo k dices tu amigo solo come pasta y esto me extraña pk son carbohidratos que le aportan energia pero no massa muscular que es el objetivo de la mayoria de vigorexicos... Estos suelen comer, pavo, pollo, ensalada, pescado... todo lo que llebe proteina y no llebe grasa.
Realmente es raro que no quiera comer otros alimentos, la question es descubrir pk realmente no los consume, si es pro miedo a dejar de estar en forma o pk se a obsesionado pro algun otro miedo, como el de enfermar, a coge alguna bacteria.... que tambien podria ser la razon pro aser tanto deporte....:S
no lo sé.
Supongo que procuras aserle entender que la obssiones y los extremismos no son buenos y que solamente lo llebaran a aumentar su ansiedad y a estar mas obsesionado si cabe...
Tambien seria bueno decirle las consecuentas que puede tener " maltratar" de esta manera su cuerpo, ya que sus niveles hormonales no seran los mismos y puede tener problemas de metabolismo, problemas de tiroides y desordenes metabolicos tambien a la hora de tener hijos....
Aparte que para mantenerse debe dejar de lado otras cosas, como studio, trabajo familia... ( no se hasta que punto esta él de mal)
Tambien, la gente que lleba ese ritmo de deprote, cuando lo tienen que dejar empiesan a engordar i a dejarse mucho, pk han llebado unos años con un metabolismo muy aselerado pro el deporte y al canviar pro una vida mas relajada pues no queman lo mismo que antes y puede llebarles a deprimir-se, etc......

No sé, yo esto es lo que te peudo decir desde la experiencia que tengo con conocidos, tales deberias hablar con un especialista...

Mucha suerte y animo!!!!
Tu amigo tiene mucha suert de tenerte como amiga sigele apoyando te lo agradecera siempre

Hola
Hola!!
Yo la verdad no sé mucho del tema, pero la vigorexia, pro lo que tengo entenedido es obsesion pro estar en forma, cuadrado, musculado.... como lo quieras decir.
Por lo k dices tu amigo solo come pasta y esto me extraña pk son carbohidratos que le aportan energia pero no massa muscular que es el objetivo de la mayoria de vigorexicos... Estos suelen comer, pavo, pollo, ensalada, pescado... todo lo que llebe proteina y no llebe grasa.
Realmente es raro que no quiera comer otros alimentos, la question es descubrir pk realmente no los consume, si es pro miedo a dejar de estar en forma o pk se a obsesionado pro algun otro miedo, como el de enfermar, a coge alguna bacteria.... que tambien podria ser la razon pro aser tanto deporte....:S
no lo sé.
Supongo que procuras aserle entender que la obssiones y los extremismos no son buenos y que solamente lo llebaran a aumentar su ansiedad y a estar mas obsesionado si cabe...
Tambien seria bueno decirle las consecuentas que puede tener " maltratar" de esta manera su cuerpo, ya que sus niveles hormonales no seran los mismos y puede tener problemas de metabolismo, problemas de tiroides y desordenes metabolicos tambien a la hora de tener hijos....
Aparte que para mantenerse debe dejar de lado otras cosas, como studio, trabajo familia... ( no se hasta que punto esta él de mal)
Tambien, la gente que lleba ese ritmo de deprote, cuando lo tienen que dejar empiesan a engordar i a dejarse mucho, pk han llebado unos años con un metabolismo muy aselerado pro el deporte y al canviar pro una vida mas relajada pues no queman lo mismo que antes y puede llebarles a deprimir-se, etc......

No sé, yo esto es lo que te peudo decir desde la experiencia que tengo con conocidos, tales deberias hablar con un especialista...

Mucha suerte y animo!!!!
Tu amigo tiene mucha suert de tenerte como amiga sigele apoyando te lo agradecera siempre

Sobre la vigorexia
El hombre es por naturaleza un animal social, dejó
escrito Aristóteles, y como tal, vive, suspira y se sacrifica para ser
aceptado por el resto de sus semejantes. Hoy, en pleno siglo XXI, los
postulados aristotélicos no sólo siguen vigentes, sino que van a más.
Han evolucionado hasta convertirse en una entelequia en la que la
imagen prima sobre el intelecto.En Canarias, el clima, el cálido estilo de vida, más
próximo al frescor sudamericano que al pragmatismo europeo, acrecientan
la necesidad de cultivar una figura modélica. Una silueta adaptada a lo
que los cánones de belleza actuales exigen. Por eso, y aunque no se
haya cuantificado el número de afectados, una cantidad indeterminada de
isleños padece vigorexia o, lo que es lo mismo, una adicción severa al
gimnasio.
Los expertos afirman que lo primero que hay que hacer
para comprender el problema es separar el grano de la paja. Hacer
deporte es sano y acudir al gimnasio es una actividad tan saludable
como podría ser correr por la playa o nadar varias horas en una
piscina. Las dificultades llegan, sin embargo, cuando se traspasa,
especialmente en el mundo del fitness, la delgada línea que separa lo
saludable de lo dañino. Partimos de una base concreta. Los vigoréxicos
suelen ser personas inseguras, con una autoestima baja, y una necesidad
acuciante de ser aceptados socialmente, relata Alejandro López, del
Centro de psicología DUO, en Las Palmas de Gran Canaria. La vigorexia,
enfermedad no exclusivamente masculina, es prima hermana de la bulimia
y la anorexia -algunos autores la han bautizado como anorexia reversa-.
Es como una droga a la que se puede enganchar uno como podría hacerlo
al sexo o a cualquier otra adicción, recuerda López.
Otro psicólogo, en este caso Fabián Alonso, comenta cómo
los vigoréxicos, en su mayoría hombres, no pueden escapar del gimnasio
una vez que empiezan a constatar los resultados cosechados tras varias
horas diarias de machaque físico. Hay que tener en cuenta que hablamos
de gente con escasas habilidades sociales, que normalmente son tímidos
y que tienen complejos. Por lo tanto, los reforzadores exteriores que
reciben -la gente que les dice lo guapos que están y lo bien que ha
quedado su cuerpo tras desprenderse de los kilitos que sobraban- les
involucran en una espiral esclavizante.
Historias desgarradoras
Los psicólogos cuentan cómo hombres que no caben por la
puerta aterrizan en sus consultas desesperados. Cuando la vigorexia
alcanza su punto álgido, la dependencia del gimnasio es tal que, en
algunos casos, se pueden generar serios trastornos. Alonso recuerda el
caso de un militar al que atendió en su despacho. Sufría ansiedad
cuando tenía que quedarse en el cuartel de guardia y no podía realizar
sus ejercicios de musculación. El gimnasio ha llegado a romper
parejas, a aislar socialmente a muchos de sus asiduos e incluso a
separarlos de sus familias, reitera Alonso. Proteínas, anabolizantes e
incluso cirugía. Cualquier cosa les vale, y no se dan cuenta de que se
están convirtiendo en verdaderos monstruos. En deformados. En sujetos
más feos de lo que eran antes.
La vigorexia es un trastorno de la conducta, pero tiene
cura. Las terapias cognitivo-conductuales actúan sobre el sujeto para
enseñarle, mediante técnicas de autocontrol, a superar tanto sus
pensamientos obsesivos como sus rituales compulsivos. Eso sí. Es
necesario que el paciente asuma que tiene un problema, algo
difícilmente posible si su entorno y la engañosa información que recibe
de su espejo lo impiden.
Hacer deporte es una actividad que el ser humano
incorporó a su modo de vida desde tiempos pretéritos. La fuerza física
y la belleza son atributos apetecibles siempre y cuando no se intoxique
la mente.
La vigorexia, o adicción severa al gimnasio, se cuela en
la vida de muchos hombres sin avisar _ _ Los expertos dicen que es un
trastorno de la conducta que tiene cura
ABC

Los vigoréxicos, aunque la evidencia les desautorice, nunca están satisfechos con la musculatura de su cuerpo

Sobre la vigorexia
El hombre es por naturaleza un animal social, dejó
escrito Aristóteles, y como tal, vive, suspira y se sacrifica para ser
aceptado por el resto de sus semejantes. Hoy, en pleno siglo XXI, los
postulados aristotélicos no sólo siguen vigentes, sino que van a más.
Han evolucionado hasta convertirse en una entelequia en la que la
imagen prima sobre el intelecto.En Canarias, el clima, el cálido estilo de vida, más
próximo al frescor sudamericano que al pragmatismo europeo, acrecientan
la necesidad de cultivar una figura modélica. Una silueta adaptada a lo
que los cánones de belleza actuales exigen. Por eso, y aunque no se
haya cuantificado el número de afectados, una cantidad indeterminada de
isleños padece vigorexia o, lo que es lo mismo, una adicción severa al
gimnasio.
Los expertos afirman que lo primero que hay que hacer
para comprender el problema es separar el grano de la paja. Hacer
deporte es sano y acudir al gimnasio es una actividad tan saludable
como podría ser correr por la playa o nadar varias horas en una
piscina. Las dificultades llegan, sin embargo, cuando se traspasa,
especialmente en el mundo del fitness, la delgada línea que separa lo
saludable de lo dañino. Partimos de una base concreta. Los vigoréxicos
suelen ser personas inseguras, con una autoestima baja, y una necesidad
acuciante de ser aceptados socialmente, relata Alejandro López, del
Centro de psicología DUO, en Las Palmas de Gran Canaria. La vigorexia,
enfermedad no exclusivamente masculina, es prima hermana de la bulimia
y la anorexia -algunos autores la han bautizado como anorexia reversa-.
Es como una droga a la que se puede enganchar uno como podría hacerlo
al sexo o a cualquier otra adicción, recuerda López.
Otro psicólogo, en este caso Fabián Alonso, comenta cómo
los vigoréxicos, en su mayoría hombres, no pueden escapar del gimnasio
una vez que empiezan a constatar los resultados cosechados tras varias
horas diarias de machaque físico. Hay que tener en cuenta que hablamos
de gente con escasas habilidades sociales, que normalmente son tímidos
y que tienen complejos. Por lo tanto, los reforzadores exteriores que
reciben -la gente que les dice lo guapos que están y lo bien que ha
quedado su cuerpo tras desprenderse de los kilitos que sobraban- les
involucran en una espiral esclavizante.
Historias desgarradoras
Los psicólogos cuentan cómo hombres que no caben por la
puerta aterrizan en sus consultas desesperados. Cuando la vigorexia
alcanza su punto álgido, la dependencia del gimnasio es tal que, en
algunos casos, se pueden generar serios trastornos. Alonso recuerda el
caso de un militar al que atendió en su despacho. Sufría ansiedad
cuando tenía que quedarse en el cuartel de guardia y no podía realizar
sus ejercicios de musculación. El gimnasio ha llegado a romper
parejas, a aislar socialmente a muchos de sus asiduos e incluso a
separarlos de sus familias, reitera Alonso. Proteínas, anabolizantes e
incluso cirugía. Cualquier cosa les vale, y no se dan cuenta de que se
están convirtiendo en verdaderos monstruos. En deformados. En sujetos
más feos de lo que eran antes.
La vigorexia es un trastorno de la conducta, pero tiene
cura. Las terapias cognitivo-conductuales actúan sobre el sujeto para
enseñarle, mediante técnicas de autocontrol, a superar tanto sus
pensamientos obsesivos como sus rituales compulsivos. Eso sí. Es
necesario que el paciente asuma que tiene un problema, algo
difícilmente posible si su entorno y la engañosa información que recibe
de su espejo lo impiden.
Hacer deporte es una actividad que el ser humano
incorporó a su modo de vida desde tiempos pretéritos. La fuerza física
y la belleza son atributos apetecibles siempre y cuando no se intoxique
la mente.
La vigorexia, o adicción severa al gimnasio, se cuela en
la vida de muchos hombres sin avisar _ _ Los expertos dicen que es un
trastorno de la conducta que tiene cura
ABC

Los vigoréxicos, aunque la evidencia les desautorice, nunca están satisfechos con la musculatura de su cuerpo

Gracias por vuestras opiniones
la verdad que mi amigo está excesivamente pendiente de su físico y del físico de los demás, ya le he dicho muchas veces que está muy bien sentirse agusto con uno mismo y a todos nos gusta gustar a los demás, pero una cosa es eso y otra lo de él. Bueno, espero que se de cuenta a tiempo, yo ya no sé que decirle. Un beso y muchas gracias.

Gracias por vuestras opiniones
la verdad que mi amigo está excesivamente pendiente de su físico y del físico de los demás, ya le he dicho muchas veces que está muy bien sentirse agusto con uno mismo y a todos nos gusta gustar a los demás, pero una cosa es eso y otra lo de él. Bueno, espero que se de cuenta a tiempo, yo ya no sé que decirle. Un beso y muchas gracias.