Hace ya un año y medio sufrí un potente brote de acné, todos los que lo padecéis o lo habéis padecido en algún momento de vuestra vida sin duda comprenderéis las razones que en mi desesperación me condujeron a tomar esta drástica medida.
Mi tratamiento con dercutane fue acompañado por el uso de la píldora yasmín durante seis meses, durante los cuales no experimenté efectos secundarios muy graves.
Finalicé en Mayo justo antes del verano y en Septiembre empecé a observar una importante pérdida de cabello que en principio no encontré preocupante.
La caída duró por primera vez en toda mi vida más de cinco meses, obviamente esto me alarmó y comencé a tomar medidas y tratamientos capilares de todo tipo que en esta ocasión no ofrecían resultados.
Desconcertada visité varios especialistas, pues también padezco sequedad ocular desde entonces.
He de aclarar que mi cabello era antes sano y completamente normal.
Transcurrieron unos meses más hasta que mi dermatóloga me diagnosticó alopecia androgenética (AGA) sin poder dar una respuesta satisfactoria a cual había sido el origen de la misma.
Nunca imaginé que llegaría a perder entre el 30 y el 40% de mi cabello ni que me recetarían minoxidil sin antecedentes familiares.
Finalmente esta es la situación en la que me encuentro hoy desde hace ya un año, no tengo ni rastro del acné que padecí en mi juventud como tampoco conservo ni la mitad de la masa capilar que tenía.
Mi cabello es débil y muy fino, pese a mi edad su aspecto es empobrecido y descuidado.
Todo esto me causa una profunda depresión,pues apenas tengo 26 años y no logro asimilar verme en este estado.