Simplemente no fumo.
Hola chic@s.
Llevaba fumando desde los catorce años (tengo treinta y nueve). Desde hace unos meses, "necesitaba" un mínimo de dos cajetillas y media diarias.
Hace tres días (justo a esta hora) que no fumo. Y quiero recalcar eso de que "no fumo".
En muchas ocasiones lo había intentado... "Hoy dejo de fumar...", "hace una semana dejé de fumar...". Pues no!, se acabó de dejar de fumar, me dije a mi misma que simplemente yo no fumaba, yo no era una fumadora. Ya está. Se acabó. No quiero volver a usar la palabra "dejar", porque engancha por sí misma.
En lugar de pensar en lo mucho que me costaba dejarlo, en cuántos días llevaba sin el vicio y en cuánto tiempo volvería a recaer, he decidido pensar en lo mucho que viví feliz y contenta sin fumar (catorce años, ni más ni menos); sin ser fumadora; por eso, de nuevo, no soy fumadora.
Por la mañana, justo en el momento en que mi hijo baja del coche a la puerta del colegio, me sorprendo haciendo un gesto con la mano hacia la guantera donde siempre guardaba el tabaco.
Me doy cuenta de que es sólo eso. Un gesto que, por repetido, se había convertido en costumbre y que, por costumbre, se había convertido en necesidad. El supuesto placer de fumar ese cigarro, era algo muy secundario.
Pues nada, a poner la radio más fuerte y a pensar en otra cosa...
Siguiente parada... Un buen café con leche, que acostumbraba a acompañar con un mínimo de cuatro cigarrillos. Nunca me había dado cuenta de lo realmente buenos que están los donuts con chocolate...
Como no quiero pesar cien kilos, me voy inmediatamente al gimnasio. No podéis imaginar lo que disfruto en esa cinta de caminar (en la que termino corriendo como una descosía...). Antes la odiaba, a los cinco minutos de darle un poquito de marcha me quemaban los pulmones, el cuello y la boca por dentro. En tres días, la diferencia es abismal. Ahora me canso, claro, se cansa la espalda, los músculos, pero sigo respirando sin quemarme.
Además, el ejercicio (pero el ejercicio de sudar, nada de cositas suaves) me ayuda a relajarme, a equilibrarme.
Regreso a casa y otras situaciones vuelven a recordarme el cigarrito. Procuro no pensar. O bien pensar en un cenicero lleno de colillas asquerosas. Imagino ese cenicero cerca de mi nariz y recreo su olor. Se me quitan las ganas.
Por si acaso, tengo cerquita, en la terraza, una cuerda de esas de saltar a la comba. Si me veo con muchas ganas, aunque de verdad que de cada vez tengo menos, empiezo a saltar con ella. Se me alivia la angustia y al mismo tiempo me siento orgullosa de mi misma, pues de cada vez aguanto más, ya no me quedo sin aliento a los tres saltos.
Ya sabéis que existen mil razones no fumar. Por ejemplo, el estupendo bikini que podré lucir en la playa el verano que viene con tanto salto...
Ánimo. Yo lo estoy llevando mucho mejor de lo que creía. Y si yo puedo, - fumadora desde niña y últimamente de casi tres paquetes diarios -, qué no vais a poder hacer vosotros.
Muchos besotes a todos.
Ver también
52 días cero nicotina
Hola,
De verdad que cheveré tú relato que motivación, te aconsejo que la leas si sientes ganas de fumar...porque tus propias palabras te alentaran a seguir.
Yo tengo ya 52 días de Cero Nicotina... fumaba desde los 16 años y tengo 25 años, intente durante mucho tiempo, pero siempre tenía una excusa para volver, aunque nunca llegue a fumar una cajetilla al día mi consumo fijo eran de 5 a 10 cigarros al día... me preocupaba que esta cantidad fuera aumentando con el pasar de los años.
Hace un año lo deje porque me operaron de la náriz y las amigdalas y me prohibieron fumar así que estuve menos de un mes sin hacerlo, luego lo retome a escondidas de mi familia.
Hasta que hace 52 días le pedi muchas fuerzas a Dios para abandonar este mal hábito que nos puede llevar a la muerte. Desde ese día como he cambiado, antes comia apurada nada más que pensando en fumarme un cigarro no disfrutaba nada, me cansaba siempre tenía la garganta reseca y mi cabello con mal olor porque me encerraba en el baño a fumar...Hoy en día me siento maravillosamente bien con dieta y actividad no he aumentado ni un solo gramo al contrario baje de peso. Mi esposo feliz porque ya no soportaba verme fumar..mi familia súper contentos..Así que vale la pena el esfuerzo.
UN DATO QUE LES PUEDE AYUDAR... Yo tengo en mi escritorio un calendario donde voy marcando con una X cada día cero nicotina...Esto me ha ayudado profundamente a NO Fumar...y por supuesto Dios siempre me da fuerzas para continuar...
BEsitos y Gracias por compartir sus experiencias
Diana
Gracias.
Gracias a Bopu y Dite por vuestros mensajes y por los ánimos que me dais al ver que lleváis todo este tiempo sin nicotina.
Yo creo que esta vez voy en serio. Durante estos días me he visto tentada en varias ocasiones y no he caído. Pero es que además, me sorprende lo poco que realmente me apetece fumar.
No niego que aún lo tengo dentro de la cabeza. Por ejemplo, hoy mi marido me ha dicho que iba a comprar el periódico, y que si quería algo. Cada sábado le decía que sí, que me trajese un paquete de tabaco.
Hoy he estado a punto de decírselo. No porque me hayan entrado ganas de fumar, sino por la costumbre. Ha sido algo automático.
No me he leído el librito ese del que habla todo el mundo. Tal vez lo lea. Pero dicen que habla de una especie de monstruito que tenemos dentro que nos pide nicotina. Sería ese monstruito el que estaba a punto de pedirle a mi marido que trajera un paquete?. Desde luego, no era yo.
Saludos.
Hola ana.
Es que yo había intentado dejarlo en muchas ocasiones, incluso había abandonado el tabaco por un largo tiempo y al final volvía a caer.
Creo que la única forma de afrontar el dejar de fumar es con optimismo y riéndote un poco de ti mismo y de esos pensamientos casi inconscientes que te dan de vez en cuando y que evocan la "necesidad" del tabaco, - ahora mismo, recién cenada, acabo de pensar en el cigarrillo, pero ha sido un momentín, ha pasado muy rápido -.
Y sobre todo, como decía antes, a mi me resulta mejor pensar simplemente que no fumo, no estar continuamente recordándome que "lo he dejado".
Y eso de aprovechar para incrementar el ejercicio físico me está ayudando muchísimo y le estoy cogiendo el gustillo a todo lo que supone poner a prueba la resistencia física y los pulmones. Cosa que antes odiaba. O creía odiarlo porque realmente no podía hacerlo.
Lo de ser optimista hay que forzarlo un poquito, lo más sencillo y normal es que te sientas fatal y andes enfadada con todo el mundo. Así me había pasado en otras ocasiones y así volvía al vicio.
No había leído el famoso librillo de Allen Carr. Suelo alejarme de los libros de autoayuda que suenan a "fabricadedinerofácil", pero al final lo he leído enterito este fin de semana.
La verdad es que si no lo habéis leído vale la pena echarle una ojeada. Un poco pesadito para mi gusto. No dice nada nuevo pero creo que le da un enfoque muy positivo y se sale de los esquemas de las terapias anti-tabaco que he visto por ahí.
Voy a ver si puedo poner el link del sitio de donde lo bajé.
Besotes.
Yo también lo disfruto, eso de oler bien.
Es una sensación nueva para mi.
Recuerdo cuando me ponía una "eau de toilette" o un perfume y me decía a mi misma "qué lástima que vaya a estropearse tan pronto con el olor a tabaco!".
Yo lo de no sacar las manos del bolsillo para fumar no lo había pensado, pero es bien cierto. Sabes qué es lo que pensaba hoy?... Pues en la cantidad de días que lloviendo, con tal de fumar, llevaba bajada la ventanilla del coche y consentía en mojarme con tal de poder echar humo.
Qué desastre!. Mira que sólamente llevo siete días y veo eso como algo un poco lejano, como si no fuera yo. Cómo es posible que el tabaco te haga hacer esas tonterías?. Tener frío, mojarte y aguantarte porque lo primero es fumar. Ya nos vale!.
Por eso le decía a Ana en el post de más arriba que es primordial saber reirnos de nosotros mism@s y de lo que somos o eramos capaces por fumar el cigarrito.
Y, por cierto, ahí va un link para bajar el famoso librito que comentaba en el mismo post. Para quien no lo ha leído, insisto, es un poco pesado, yo ya no fumaba cuando lo leí, pero creo que dos o tres cosillas muy interesantes sí tiene.
http://www.lacoctelera.com/myfiles/k/EsFacilDejarD-eFumarSiSabesComo.pdf
Mil besotes sin humo.
Yo también lo disfruto, eso de oler bien.
Es una sensación nueva para mi.
Recuerdo cuando me ponía una "eau de toilette" o un perfume y me decía a mi misma "qué lástima que vaya a estropearse tan pronto con el olor a tabaco!".
Yo lo de no sacar las manos del bolsillo para fumar no lo había pensado, pero es bien cierto. Sabes qué es lo que pensaba hoy?... Pues en la cantidad de días que lloviendo, con tal de fumar, llevaba bajada la ventanilla del coche y consentía en mojarme con tal de poder echar humo.
Qué desastre!. Mira que sólamente llevo siete días y veo eso como algo un poco lejano, como si no fuera yo. Cómo es posible que el tabaco te haga hacer esas tonterías?. Tener frío, mojarte y aguantarte porque lo primero es fumar. Ya nos vale!.
Por eso le decía a Ana en el post de más arriba que es primordial saber reirnos de nosotros mism@s y de lo que somos o eramos capaces por fumar el cigarrito.
Y, por cierto, ahí va un link para bajar el famoso librito que comentaba en el mismo post. Para quien no lo ha leído, insisto, es un poco pesado, yo ya no fumaba cuando lo leí, pero creo que dos o tres cosillas muy interesantes sí tiene.
http://www.lacoctelera.com/myfiles/k/EsFacilDejarD-eFumarSiSabesComo.pdf
Mil besotes sin humo.
En el link hay una cosa que no tiene que estar.
Es .../k/EsFacilDejarDeFumarSiSabesComo.pdf.
No hay que poner ese guión después de "...DejarD...".
Gracias por tus ánimos!!!
Me gusta tu planteamiento, lo voy a llevar a la práctica a ver si me da mejor resultado. UN saludo y ánimo
