El tampón no se puede perder dentro ni nada por el estilo, ya que la cérvix que es el orificio de entrada al útero tiene una apertura del tamaño de un alfiler. Además si mantuviste relaciones y no notaste nada rato, es que te lo habías sacado. Y por otro lado, si te lo hubieras dejado, notarías mal olor en la zona vaginal.
Así que no te preocupes, que no lo tienes dentro.