Os voy a contar la historia de mi madre, una mujer de 52 años que dedicó 17 años de su vida a cuidar de su hijo con parálisis cerebral. Hace dos años le diagnosticaron artrosis degenerativa. Esta enfermedad provoca el deterioro del cartílago articular, por lo que los huesos se van desgastando y se sufre un terrible dolor.
Durante los dos últimos años sus dolores iban en aumento, tanto que su capacidad de movimiento y su capacidad física disminuían lentamente con el paso de los días, mi madre iba al médico y la solución que le daban era un aumento de la dosis de sus pastillas diarias.
Avanzamos hasta hace unos meses y mi madre sufre dolores mucho mayores, insoportables, en la zona de la espalda. Esos dolores eran tan grandes que cada vez le impedía hacer menos cosas que antes, incluso al reir le dolía.
Tras la desesperación, visitaba al médico de cabecera porque intuía que tenía algo más aparte de la artrosis pero el médico no mostraba interés y lo único que le mandaba eran radiografías (que según él, eran a petición de mi madre), tras las radiografías el médico afirma que los dolores que tiene son normales por su enfermedad y que no tenía nada más grave y decidió recetarle más medicamentos.
El médico no mostraba interés en la salud de mi madre y decidimos cambiar de médico de cabecera. Tres semanas más tarde, mientras el nuevo médico estudiaba la situación de mi madre, mi madre sufría unos dolores terribles, necesitaba ayuda para moverse y lloraba al levantarse del dolor, se sentaba en el sofá y no se movía de ahí en todo el día hasta que dos días más tarde no se podía mover de la cama, al más mínimo movimiento lloraba de dolor, durante esos días llamamos a una ambulancia para que se la llevaran al hospital, pero esta vino en cuatro ocasiones y solo vino para inyectar a mi madre lo necesario para que aguante varias horas. Dejó de sentir el cuerpo de pecho hacia abajo (no sentía nada ni podía mover nada) y se la llevaron al hospital por fin.
Tras su paso por el hospital, mi madre sale con dos tumores extirpados que estaban en las vértebras y ejercían presión sobre la médula y por lo tanto se queda tetrapléjica, esos tumores son tumores secundarios porque proceden de un tumor principal, de un cáncer de mama que probablemente no se lo hayan detectado a tiempo.
La vida de mi madre y la de mi familia ha cambiado por completo en menos de un mes, mi madre no puede moverse, sufre dolores terribles desde que se despierta hasta que se duerme y lucha lo que puede por seguir adelante, mi padre de 54 años ha tenido que dejar de trabajar para cuidarla, mi hermana de 30 años ha tenido que cancelar planes para dedicar su tiempo a mi madre y yo con 19 años aporto lo máximo posible para quitarle trabajo a mi hermana y a mi padre mientra intento sacar mis estudios.
Es una pena que hayamos llegado a esta situación, se querían ahorrar el dinero de hacer una resonancia magnética y al final lo estamos pagando caro con la vida de mi madre.Viene de vez en cuando un médico a valorarla pero todavía no ha venido un asistente social ni otro tipo de personal que nos ayude, las ayudas que nos aportan son siempre muy limitadas y tardan en llegar.
En nombre de toda mi familia, lo único que pedimos es que haya justicia, porque no es normal que el médico que ha tratado a mi madre juegue con la vida de las personas de esta manera, porque al cáncer de mama le ha dado tiempo a expanderse por la médula hasta dejar a mi madre tetrapléjica y por eso, una resonancia magnética a tiempo puede cambiarte la vida.
Me gustaría que firmases y compartas esto para que más personas firmen y así consigamos justicia.MUCHAS GRACIAS.
https://www.change.org/p/una-resonancia-magn%C3%A9tica-a-tiempo-podr%C3%ADa-haber-cambiado-la-vida-de-mi-madre
