Sobre el dr. francisco abril.

Nunca me había gustado mi nariz, y finalmente, me decidí a operármela hace poco (pensé que si no lo hacía ya, quizá no encontraría otro momento, así que lo mejor sería no darle más vueltas e intentarlo).

Llegué a la consulta del Dr. Abril por primera vez con mucho miedo y bastante desorientada en temas de cirugía estética, puesto que no tengo a ningún conocido que se haya sometido a ninguna intervención de este tipo y no pude hacer ninguna consulta.
Antes de elegir cirujano, estuve navegando por internet intentando encontrar algo de luz, y la conclusión a la que llegué es que no hay nada seguro, puesto que todo el mundo cuenta su experiecia y obviamente, como en todas las cosas en la vida, a cada cual le ha ido de una forma distinta.

En cuanto a mi experiencia, lo cierto es que es bastante buena. Recibí un trato muy amable por parte del doctor y del resto del equipo. Yo sólo quería una nariz recta, y me dio mucha seguridad que el doctor me dijera al verme que el único cambio que le haría sería ése (y yo aún no le había comentado lo que quería, tan sólo que no me gustaba mi nariz).
Me explicó todas las dudas que le planteé y salí de la consulta mucho más relajada y con bastante más seguridad. La rioplastia me la hiceron a mediados de Octubre del pasado año. Todo salió fenomenal, la intervención duró muy poquito tiempo, y antes de que me quisiera dar cuenta, ya estaba en mi habitación. Todo el personal fue muy amable conmigo, y eso es algo que se agradece cuando te escuentras en un postoperatorio. El Dr. Abril fue a verme al día siguiente de la operación (en realidad no habían pasado ni 24 horas). En teoría me podía haber ido al día siguiente, pero decidí quedarme otro día más en la clínica porque soy algo miedosa. Cuando me quitaron los tapones, me fui a hacer turismo con mi escayola Así que, como imaginaréis, apenas se tienen molestias después de la operación (todo es bastante llevadero). A la semana siguiente me la quitaron y la sustituyeron por unas tiritas del color de la piel que casi no se notaban. Ya podía ver mi nariz, y estaba contentísima (¡no me lo podía creer!).
Posteriormente, he ido a revisiones, y todo muy bien.
Por cierto, el precio es bastante módico.

Os deseo a todas la misma suerte que tuve yo.

Saludos desde Cartagena.