Estoy desesperada como pocas veces he llegado a estarlo. Estoy atascada en un peso (saludable) pero que a mí no me gusta, quiero pesar mucho menos y no consigo salir de esa maldita cifra que no diré porque no me parece correcto en un foro como este.
Dicen que estoy delgada, en mi peso, pero yo no consigo verme así, ¿por qué? ¿por qué me veo tan asquerosamente gorda? ¿por que me da asco mirarme al espejo si se supone que estoy delgada? Para mí, vestirme cada mañana es una tortura, que los pantalones me entren pero no me queden grandes es la mayor pena que tengo. No me peso por miedo a ver cuanto pesa mi grasa, para no deprimirme y que no me entre la ansiedad. ¡La ansiedad! Mi peor enemiga. Me estoy medicando yo sola contra la ansiedad, abuso de tranquilizantes y ansioliticos, y se que hago fatal, que puedo matarme, pero me da igual con tal de placar esta horrible mierda que es la ansiedad por la comida. Ya he llegado a un punto en el que no sé cuando tengo ansidad o hambre, mi cuerpo ya no funciona bien.
Tengo anemia, y la garganta destrozada de tanto provocarme el vomito. Día sí y día también me lo provoco, hasta que llega el día que por mucho que lo intento no consigo expulsar nada, y entonces me doy un atracón a laxantes. Odio vomitar, y odio los laxantes, pero no puedo parar. Cada vez que estoy vomitando lo único que deseo es que entre mi madre en el cuarto de baño, me vea y me haga parar con sus gritos. pero nunca pasa, y yo sigo vomitando hasta que no puedo más, hasta que me duele todo el cuerpo o hasta que sangro. Y para no vomitar, procuro no comer. Dejo de comer solo para no provocarme el vómito, no ceno y no desayuno solo para no tener que vomitarlo.
Pero hoy he desayunado, y no he vomitado. Y no consigo sentirme orgullosa por el gran logro que he hecho. Me siento fatal por no haber vomitado y me no he podido ir a clase, he estado en el baño llorando hasta que me he cansado.
No puedo más, nadie puede más, mis amigos, que saben de esto, ya no saben que decirme para que pare, están cansados de mí, yo estoy cansada de mí. Cuando veo sus caras de depeción porque se han enterado de que he vuelto a vomitar, o que no he comido... esa cara no se me borra de la cabeza. Esto es un infierno y no solo para quien lo vive, sino para todos a su alrededor. Y lo mejor de todo es que mis amigos saben de esto, pero no mis padres... no quiero decepcionarles más.
Gracias por leerme, necesitaba desahogarme.